Tanto apreté en mi mano
aquel sueño tan soñado,
que cuando por fin la abrí
el sueño se había asfixiado.
M. Lobato
domingo, 31 de mayo de 2015
AQUEL SUEÑO
Tanto apreté en mi mano
aquel sueño tan soñado,
que cuando por fin la abrí
el sueño se había asfixiado.
M. Lobato
!OJALÁ QUE NO SE FUERA!
Volvió a mí la primavera,
por ella he vuelto vivir
!ojalá que no se fuera!
M. Lobato
ROSA DE ESPUMA
Aquella rosa de espuma
que mi mar dejó en tu orilla,
dice cosas tan sencillas
que sabrás, sin duda alguna,
que si roja, por fortuna,
en tus manos se volviera,
fue el amor quien la tiñera
y no tu sangre divina;
pues le quité las espinas
para que nunca te hirieran.
M. Lobato
sábado, 30 de mayo de 2015
ME ESTOY TRAGANDO TU NOMBRE
Mi amor andaba vagando
sin bautizar por las calles
y yo lo andaba buscando.
Ahora ya le puesto nombre,
van a creer que es mentira,
esa es la pena que tengo,
pues no puedo pronunciarlo
por mucho que esté queriendo.
¡Ay alcohol de mis heridas!
me estoy tragando tu nombre
por no gritarlo...!mi vida!
M. Lobato
EL DIOS DE LAS DOS CARAS
Tengo una musa secreta
que me confunde con Jano
y teme, mas teme en vano;
él es dios y no poeta.
M. Lobato
QUISIERA DECIRLE ALGO
Quisiera decirle algo,
pero me puede el temor
!Dios mío que poco valgo!
¿Por qué siempre gana el miedo,
siendo más fuerte el amor?
M. Lobato
MI CIELO
"Mi Cielo" en su voz es más Cielo
y aunque no sé si es el mismo
que el "Cielo" de los amantes,
ese "Cielo" ya es bastante...
aunque sea sólo cariño.
M. Lobato
viernes, 29 de mayo de 2015
EL GALEÓN
Quién diría galeón
que diste la vuelta al mundo
para luego, en un segundo,
naufragar en el amor.
Quizás fueran tus maderos
astillas del astillero
que hizo mi corazón.
M.Lobato
TU SOMBRA
Soy una sombra sin rostro,
casi sin alma y sin vida,
sólo ando cuando andas,
respiro si tú respiras.
La silueta de tu yo
a tu voluntad cosida;
ni existo cuando no estás,
y cuando estás, ni me miras.
M.Lobato
sábado, 23 de mayo de 2015
LA ENTRADA
Estallan los cohetes por los caminos
anunciando en lo alto a los peregrinos
porque ya están llegando hasta la aldea
procesión del Rocío por las “vereas”.
El alma polvorienta viene cantando
detrás de un Simpecado que ya está entrando,
delante una bandera abriendo paso
la Virgen que ya espera, Dios en sus brazos.
Al pasar por su puerta los caballeros
llevan las riendas cortas, “quitao” el sombrero,
una fuente de encajes en sus gruperas,
todos miran “pa” dentro “pa” verla a Ella.
Se para la carreta, se para el pueblo,
salpican a la ermita los sentimientos,
y brillan en mis ojos, sin previo aviso,
lágrimas que se escapan sin mi permiso.
Repican las campanas y por el aire
los ¡vivas! a la Virgen tras de la salve,
vuelan las golondrinas surcando el cielo,
¡ya está en el Rocío los rocieros!
Repiten las campanas
un nombre que se saben de memoria,
que en el Rocío está entrando
tres siglos de su historia,
Almonte la está esperando…
¡Sanlúcar a las puertas de la
gloria!
M. Lobato
viernes, 22 de mayo de 2015
!QUE ESTOY LLEGANDO!
Hombre nuevo, nuevo nombre;
bautismo de vino derramado,
por ese camino andado
desde Sanlúcar al Cielo;
por la gracia de Dios y de su Madre,
!ya puedes llamarte rociero!
La mirada se me escapa
sin hacerme ningún caso,
va corriendo hasta la ermita
por delante de mis pasos.
Y se posa la primera
en su inmaculado blanco,
que el alma no tiene espera
cuando lo que espera es tanto.
El cuerpo cansado
cuenta
cada paso que está dando
la tarde pasa… ¡qué lenta!
Y sin querer. suspirando,
el alma grita contenta
¡que llego!, ¡que estoy llegando!
M. Lobato
INSÓLITA FLOR
Vino al mundo extraño mayo
a traerle tu existencia;
no estás aquí porque sí,
estás porque siendo ausencia,
su primavera,sin ti,
añoraba tu presencia.
Flor de fuego, flor de nieve;
eres aroma de campo,
libertad que se percibe,
insólita flor que vive
zambullida en el asfalto.
Con tu delicado olor
unges al mudo su herida;
mi puñadito de vida,
pincelada de color,
la del pincel del amor,
en un lienzo negro y blanco;
a mi jardín te trasplanto,
ñora que adereza el alma,
¡oh! flor de agitada calma,
soberana del encanto.
M. Lobato
jueves, 21 de mayo de 2015
EL ROCÍO. AL CAMINO LAS PISADAS.
Desierto de gentío;
arena blanca, blanca la Paloma,
sudor hecho rocío,
y lenta ya se asoma
la carreta de plata
entre las lomas.
El sol en los semblantes,
y allí donde los ánsares se posan
los bueyes, jadeantes,
se paran y reposan;
y el oro a los cristales, que rebosan.
En busca de los pinos
retoma el boyero la
aguijada,
en pie los peregrinos,
se acaba la parada,
y vuelven al camino las pisadas.
El alma ya sin linde;
la tarde, a las coplas dejó espacio;
el sol al fin se rinde;
y andando muy despacio
llegaron las estrellas a Palacio.
M.
Lobato
miércoles, 20 de mayo de 2015
EL ROCÍO. LA SALIDA.
Voz de bronce repicando
y en el azul estallidos,
los bueyes ya están uncidos
y la marisma esperando.
Al rociero alumbrando,
como un Dios amanecido,
el sol de pan ofrecido
al alma que está cantando.
Tintinean campanillas,
a caballo caballeros,
peregrinos en la orilla.
No sé dónde vas romero,
pero al oír tus coplillas
se que vas buscando el Cielo.
M.
Lobato
TRES MARÍAS. CONSTELACIÓN DE ROCÍO.
Comienza la cuenta atrás, mañana se va Sanlúcar, Sanlúcar de
Barrameda, por las arenas de siempre, las arenas de Doñana, a buscar a la
Señora; Rocío, Reina y Pastora. Estrella
de la Mañana.
Dos gotitas de Rocío
sobre el lirio de mi alma,
y las dos son sanluqueñas.
Mas como no hay dos sin tres
la tercera es marismeña
y este lunes la veré.
M. Lobato
lunes, 18 de mayo de 2015
NUNCA
¿Crees que me iré para siempre?…
¡Nunca!
Habiendo probado la miel en tus labios,
mi otro mundo es éste,
éste mi Cielo de azúcar.
¿Crees que la hiel de la muerte
me arrancará de tu lado?…
¡Nunca!
M. Lobato
ALEGRÍA
Ya empiezas a querer parirme, alegría,
tú a mí,
cuando yo tuve que soplar las nubes de tu sol,
y me quedé sin aire para respirar mi vida.
Así se escribe la historia;
sin embargo…
¡Bienvenida!
M. Lobato
TRISTEZA
Quién te dio permiso para entrar, tristeza,
y ocuparlo todo;
pero, ya qué estás,
quédate,
al menos, no estaré solo.
M. Lobato
EL CIELO ESTÁ EN TU MIRADA
Hoy a mí me supo a
poco
el azul de la alborada,
porque soñé con tus ojos
anoche de madrugada.
Si Morfeo me engañó,
entonces no digo nada;
pero si dijo verdad,
el cielo está en tu mirada.
Al cielo quisiera ir,
mas si para ir al cielo
yo me tengo que morir,
¡venga la muerte ligero!
pues este vivir sin ti,
ni es vivir, ni yo lo quiero.
M. Lobato
BAJO EL PARAGUAS DE LOS SUEÑOS
Hoy es ayer, porque ayer viví;
hoy no encuentro nada que ponerme
para vestir la existencia desnuda de motivo,
sólo camisas negras,
y no quiero…
me niego a salir de luto por las calles,
y dar pena.
Sonrío, y se me cae la sonrisa,
cogida con alfileres robados a otros días
a mi carne de ahora,
y se hace triza sobre el suelo del presente,
y cruje bajo los pies de la gente que la ignora,
como mariposa nacida a destiempo
sin flor donde posarse.
Se desplomó el otoño sin avisar,
y llueven hojas sobre mi pensamiento;
la primavera se secó a mi alrededor,
como útero ingrávido de anciana quinceañera
en plena noche de amor.
Se apagó la luna,
pero sigo caminando
bajo el paraguas de los sueños,
buscando la luz.
M. Lobato
jueves, 14 de mayo de 2015
miércoles, 13 de mayo de 2015
SE ACERCA EL DÍA
Sin sonar estoy oyendo
la flauta y el tamboril,
no sé qué me está ocurriendo,
¿Sonarán dentro de mí?
M. Lobato
El SEXTO SENTIDO
Cuando quiera gritar,
podréis sellarme los labios con piedras preciosas,
con besos tallados en cristales huecos
que alumbran silencios.
Pero la pluma que vuela sin pájaro,
cantará por el cielo blanco sus verdades,
y su negro canto,
vestirá de luto vuestro afán de mentiras.
Cuando quiera llorar,
podréis echarme tierra en los ojos
y desecar la marisma de mi alma
fingiendo alegrías.
Pero las astillas clavadas
en la oscuridad de mis pupilas sin fondo,
derramarán mi llanto
sobre sus tumbas.
Cuando quiera tocar.
pondréis entre mis dedos terciopelo,
tejido con sueños robados
a quien nada tiene.
acariciaran los pechos vacíos de las madres exprimidas
de los mundos ignorados,
que ocultáis bajo las alfombras del olvido.
Cuando quiera oler,
podréis destilar el perfume de todas las rosas,
y convertir en jazmines
las estrellas de las tapias de vuestro universo.
Pero impregnado llevaré,
en lo más hondo de las entretelas de mi carne,
el aroma a podrido del dolor ajeno
que respiro en vuestra culpa.
Cuando quiera saborear,
cubriréis mi mesa con manteles infinitos,
y en cálices dorados, rebosando disimulo,
intentaréis ahogar mi conciencia embriagada.
Pero yo seguiré vomitando las palabras
de las bocas vacías, que buscan las migajas
escupidas por
vosotros,
al mirar por encima del hombro de su hambre.
Cuando quiera amar,
podréis arrancarme el corazón que tengo roto;
pero no podréis impedir que lata caliente en vuestra mano…
por amor.
Pero ¡por Dios!
no me pidáis que os ría la gracia;
porque, gracias a vosotros,
ya no sé reír.
M. Lobato
martes, 12 de mayo de 2015
AMOR DE PRIMAVERA
Devoro la distancia a tarascadas;
como un ciego acaricio tu recuerdo,
y a veces por buscarte yo me pierdo,
me muero, resucito y luego… nada.
Te escondes cual lucero a la alborada,
y muerdo la almohada y en mis sueños
ni siquiera pretendo
ser el dueño
de la piel donde te llevo tatuada.
Sólo quiere bailar mi pensamiento,
como baila el perfume con la rosa,
marchita primavera de un momento.
Y volar como breve mariposa
y al posar sobre ti mi sentimiento,
que fuéramos al fin la misma cosa.
M.
Lobato
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